Es así, en este sentido, podemos comprender que el matrimonio siempre tiene una función puramente pragmática con lo que significa la vida de las personas. Es una suerte de relación que responde muy bien y es muy eficaz a lo que significa el cuidado de los hijos, la formación de un núcleo de personas que se ayudan entre si y que cuentan unas con otras para lo que es el desempeño diario y las labores.
A esto se le suma que el matrimonio es sin dudas un fuerte lazo de amor, una de las emociones más importantes que puede experimentar una persona en vida. El amor es la suerte de poder vivir el placer tanto espiritual y físico con una persona. Sin dudas este no es un detalle menor, ya que el amor es sin dudas una de las principales metas u objetivos que puede tener un a persona para con su misma vida y para con al vida de los seres que más quiere en este mundo.











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