Si tienes un negocio y das fiado, puedes tener problemas con tus clientes. Este es un buen gesto, demuestra tu amabilidad y compasión por los demás, pero puedes salir perdiendo. Corres el riesgo de que no te paguen y que además la persona se enoje cuando le cobres. No solo perderás el dinero, sino también el cliente y la amistad. Para mantener las cuentas claras, aquí a continuación algunos refranes de no se fía que te servirán para tu negocio.






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