Muchas veces las personas nos pasamos de nuestros limites, no de los limites impuestos, sino de aquellos que compartimos con los demás. De esos horizontes personales que tenemos día a día porque somos seres de comunidad. En estos momentos tenemos realmente una dificultad, porque hemos ofendido a otro, o tal vez nos sentimos ofendidos, y es bastante incomodo estar así.
Allí es cuando aparece el gesto del perdón, que como bien te dicen los grandes cuando eres un niño, no basta con solo decir la palabra sino que hay que sentirlo realmente, y parece ser que esta ultima parte es la más difícil de todas. Porque perdonar implica dejar de lado esa ofensa y eso es dejar pasar algo que nos molesto, pero al fin y al cabo eso es el perdón realmente. Y para diferenciar, queremos señalar que perdonar y recuperar la confianza son dos cosas diferentes. Por un lado tenemos la capacidad de dejar de lado una ofensa, pero eso tal vez no quiera decir que podemos volver a confiar en esa persona plenamente. Igualmente el perdón real es algo que todos debemos practicar en nuestra vida, a veces duele mucho, y para algunos puede ser difícil, pero generalmente es el mejor camino a tomar para resolver un problema. Una vez que las cosas suceden son por algo, y ahora seguro tienes una visión más clara de todo el panorama.
Con motivos de hacer crecer el espíritu incentivando el perdón es que humildemente te dejamos una serie de poemas que tocan el tema y con palabras hacen referencia al respecto.
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